martes, 30 de octubre de 2012

EL JURADO

transexuales


Todo partió como jugando, se trataba de una fiesta de disfraces y me disfrace de mina, me puse un vestido tipo Marilyn, y la verdad es que se me veía una cola bien sexy, me relleno un sostén de copa y nos fuimos con un amigo disfrazado de John Kennedy.

Nos motivaba ganarnos un jugoso premio. Mi amigo al verme no pude evitar darme un agarrón, a lo que respondí con un fuerte puñetazo, luego de lo cual me pidió perdón y me dijo que no la había podido evitar pues se me veía un culo muy rico.

Y nos fuimos a la fiesta, conversamos con varios amigos, que como nunca me vinieron a saludar, no falto el patudo que me dio u beso en la mejilla y tuve que besarlos a todos para no empezar con manotazos en plena fiesta. De repente me fui a buscar un trago y al pasar junto a un grupo de hombres sentí un fuerte pellizco en mi trasero, me doy vuelta indignado y veo a un viejo como de 70 q me cerraba pícaramente el ojo, me estaba devolviendo a increparlo cuando me doy cuenta que tiene un distintivo de jurado, así es que rápidamente recapacité y también le cerré el ojo pícaramente.

Los disfraces estaban muy buenos, y empezó la competencia, subimos con mi amigo como pareja, pero rápidamente nos descalificaron, sin embargo surgió una barra espontánea q empezó a corear Marilyn Marilyn, por lo cual me hicieron subir ahora solo, y quede seleccionado, luego vino una segunda ronda y volví a ganar, lo único q no me gustaba era q el vejete me seguía mirando y cerrando el ojo, y llegó la final, quedamos 2, bueno yo quería ganar y en el paseo que di, no sé de donde me dio por mover la cola, y como la mayoría del jurado eran hombres, gané.

Luego vino la vuelta triunfal y repetí cadenciosamente le mismo movimiento.
Me fui al camarín feliz a cambiarme el disfraz, pensaba si compartiría algo con mi amigo, cuando golpean la puerta, la abro y era el vejete con un ramo de flores que me entrega muy galantemente, le doy las gracias, me doy vuelta para depositarlas en una mesa para despedirme y siento que de nuevo me pellizca, lo increpo y trato de fresco y que no corresponde pues es solo un disfraz y que soy hombre, que pena dice, pero enseguida agrega tienes un lindo culo de mujer que me voy a comer y que vas a ver como lo v agradecer, acto seguido y ante mi atónita mirada entra la camarín y cierra la puerta y le pone seguro, yo reacciono y forcejeo con él para echarlo de la pieza pero no puedo, luego se me viene encima lo rechazo pero a pesar de su edad es muy fuerte y mientras con una mano me toma por la cintura con la otra me acaricia y aprieta el trasero, sigo forcejeando y logro soltarme, pero más que nada por q el me suelta pero ahora para abalanzarse sobre mi vestido y rajármelo, dejándome solo en ropa interior femenina, me vuelve a abrazar de la manera anterior y en la refriega siento su cuerpo muy pegado al mío y un bulto duro entre sus piernas, de repente me hace girar y mis nalgas ahora sienten esa dureza, de repente me suelta algo pero en menos de un minuto siento ahora para por mis nalgas algo caliente y duro, no hay dudas que debe ser su pene, lucho por liberarme pero no puedo, incluso en la lucha me muerde suavemente las orejas y me mete hasta la lengua en ellas, sigo luchando pero es en vano, le grito q me suelte que no soy gay, pero no hay caso solo me repite que me va a comer ese rico culo y que después se lo voy hasta agradecer.

Y casi sin darme y de un tirón me arranca el cola less, luego siento una de sus manos en mi hombro y su otro brazo en mi cintura, me empieza a empujar del hombro y me obliga a inclinarme, y ahí estoy con mi trasero a su disposición, pienso rápido y se me ocurre apretarlo, pero a cambio recibo unas fuertes nalgadas que me hacen sobarme y perder la fuerza y la concentración, es el minuto que aprovecha para metérmela de un solo empujón, grito pero ya la tengo adentro, siento que me parte, pero se queda quieto y disminuye mi dolor, siento q me susurra al oído, viste linda ya te la comiste enterita.

Sáquemela por favor, le dije, duele mucho, y Ud. ya se dio el gusto, entonces me respondió si me das un besito lo pienso, afortunadamente el dolor iba cediendo pero aun dolía por lo cual aunque me daba repugnancia le dije que bueno, entonces se puso sobre mi yo torcí mi cabeza y lo empecé a besar. No lo podía creer yo ensartado besando al hombre que me la tenía metida, pero lo hacía para que me la sacara rápido. Después del beso me dijo, besas muy bien linda, la verdad es que el casi me había comido la boca y yo solo trataba de empujar su lengua hacia afuera que casi entraba hasta mi garganta, entonces hizo como que me la sacaba y me la volvió a enterrar. Le grité mentiroso, pero no me hacía caso y me seguía bombeando, a los minutos me pregunto te gusta, yo le respondí NOO sácamela, bueno dame otro besito y te la saco, le dije no te doy nada y me siguió bombeando, bueno ya le dije después de unos minutos y me beso de nuevo pero ahora me bombeaba mientras me besaba y como q me sentí de él y me empecé a mover y a excitar, entonces me la saco y se sentó en la cama y me dijo, linda si quieres más, ven y siéntate en ella, la puerta está cerrada y solo yo sabré que te gusto mi polla, y cuando quieras más me visitas no más con un vestidito, como el de hoy y si me mueves la colita sabré lo que quieres. Algo me llevo a aceptar la invitación y me senté sobre el dándole la espalda, ahora me entro casi sin dolor y al revés fue muy agradable sentir ese pedazo de carne duro y caliente dentro de mí, me pidió otro besito y no dude en recostarme sobre el doblar mi cabeza y buscar su boca, mientras la tenía entera adentro, luego levanto mis piernas y nuevamente me empezó a bombear llegue a gemir del gusto, el viejo tenía razón a mi culo y a mí nos había gustado esa polla.

Mientras cabalgaba en ese monstruo mi hombre me detiene, me pone de espaldas en la cama puso mis piernas en sus hombros y me la volvió a clavar, ahora veía mi cara de placer cada vez que me la empujaba hasta que sentí q mi inundo de leche, luego se puso a mi lado en cucharita y sin sacármela nos dormimos, al despertar todavía la tenía adentro y su brazo en mi cintura me impedía levantarme solo podía mover mis caderas con facilidad las empecé a correr para sacármelo pero sentí su brazo fuerte y que se le puso dura y me la dejo ahí, después de un rato se levantó y me dejo salir, me vestí le di un beso él una nalgada y me fui, al revisar mi bolso vi q tenía un regalito, me mire en los espejos del salón y note como mis caderas más anchas y con un mayor movimiento al caminar, el vejete me había hecho mujer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario